domingo, 28 de septiembre de 2014
Me considero defensora de que todo lo que ocurre está en nuestra mente, y todavía no he conseguido averiguar si eso realmente tiene nombre o me estoy volviendo loca (mi mente, una vez más).
Creo que todo lo que nos sucede o rodea ocurre porque nosotros pensamos que puede ocurrir, es decir, "me da ansiedad si no fumo", "aquel beso me produjo éxtasis y el otro asco", "me gustan los macarrones", "si tengo que estudiar no me relajo hasta que lo hago", "me pongo nervioso en los exámenes"... 
Me parece que la química cerebral influye muchísimo en los estados de ánimo y, por ende, en el comportamiento. Sin embargo, creo que hay algo que va más allá de lo físico, algo que podríamos denominar alma. Claro que no hay pruebas de que exista el alma, pero tampoco hay pruebas de que haya algo más allá de nosotros mismos. Es decir, todo lo que vemos a nuestro alrededor podría ser una invención de nuestra propia alma. Tal vez el mundo físico es sólo el reflejo deslucido del mundo espiritual, que es el único que verdaderamente existe. Eso explicaría por qué no existe lugar alguno - ni en nuestro cuerpo ni en ningún otro rincón de esta realidad - que contenga al alma. Por supuesto que esta hipótesis es incomprobable, pero eso no le quita interés.

He llegado a pensar que según mis creencias, la mente del ser humano, y por tanto, la nuestra, no tiene límites: y con eso quiero decir que el ser humano puede controlar su fuerza, su voluntad, sus necesidades e incluso la enfermedad. Pero siempre teniendo como límite la necesidad de tener a los demás para sobrevivir, como decía Aristóteles y los griegos de la filosofía occidental. El ser humano está condicionado por el todo, que es la ciudad y sin ciudad no somos nada. Pero, qué es lo que nos construye a nosotros mismos? Las circunstancias? Yo creo que lo correcto sería decir que lo que nos construye a nosotros mismos es la propia química cerebral y el comportamiento de la persona ante distitas circunstancias o situaciones. Si tú crees que puedes hacer algo, automáticamente tu mente va a luchar por lo que quieres conseguir porque no encuentra ningún impedimento. Si tú te obsesionas con que algo es de x manera y por tanto tienes que vencer z obstáculos, la mente de cierra y se bloquea. Lo mismo ocurre con el tabaco: si tu crees que no puedes dejar de fumar, no dejarás de fumar.

Y si todo esto es cierto me pregunto cuáles son los verdaderos límites del ser humano: dejando atrás la filosofía de Aristóteles, la mente no conoce límites.

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