viernes, 25 de octubre de 2013

Parece que no entiendo que no habrá segundas partes.

Le he vuelto a ver y la verdad es que no ha sido fácil. Estoy cansada de mirarle y ver una decepción constante. Dime si es normal que dentro de dos meses y medio hagan cinco años desde que intento olvidarte, y que aún no te hayas ido. Que a veces no dueles pero todavía me permito una noche de cada mes o cada dos para llorarte a solas y en silencio. Que me jode verte ahí, viendo todo lo que eres gracias a mí. Que fui yo la que te vió cuando nadie te había visto. La que te apoyó a cumplir sus sueños y la que te enseñó a luchar por lo que realmente quieres: pero yo no entraba en esos planes. Me duele que lo hayamos sido todo, y nos miremos como nada, o ni eso. Que a veces querría tocarte una vez más, mirarte unas décimas de segundo a los ojos, quizá llorarte... mientras que una parte de mí tan solo intenta odiarte. No me siento yo, es como si me hubieran quitado parte de mi alma, como si ya no pudiera volver a sentir lo mismo por nada ni por nadie. No me he vuelto a enamorar como de ti: que ha habido chicos de tres meses y chicos de semana y media,  pero ninguno vuelve cada noche, o cada mañana. Y es jodido, porque en todo este tiempo no ha habido ni un solo día en el que no haya pensado en ti por la más mínima cosa. A lo mejor, tan solo estoy buscando alguien que ocupe tu lugar. Alguien por quien arriesgarlo todo y luchar sin miedo a nada, dispuesta a esperar, a llorar y a sacrificarse. Pero está visto que esta coraza es demasiado fuerte y no lo consigue.

0 comentarios:

Publicar un comentario

 
;